Club La Costa

Mi papá trajo un tiempo compartido del Club la Costa en España hace unos 15 años. Lamentablemente, falleció en 2017 y como hijo único, terminé con él, como dijeron, el contrato continuó después de su muerte.

Soy una madre soltera que trabaja como camarera en una escuela, por lo que realmente no podía pagar el mantenimiento. Decidí intentarlo y aprovecharlo al máximo, pero la semana de papá era en marzo y no podía tener tiempo libre en el trabajo, o sacar al pequeño Alfie de la escuela y conseguir un intercambio para mi semana era imposible.

No quería tener que pagar por algo que ni siquiera podía usar, así que me puse en contacto con Legal Exits y me ayudaron a obtener una compensación, ¡ya que el contrato con CLC ni siquiera era legal según la ley española!